Los Veleros de la Virgen de Gracia son un grupo de devotos que desempeñan un papel fundamental para la celebración de la Novena en honor a la Santísima Virgen y su labor comienza mucho antes de que se encienda la primera vela. Tras años de dedicación a la Patrona, ha llegado el momento de dar paso a las nuevas generaciones, por lo que los actuales Veleros han puesto fin a esta labor de iluminar a la Santísima Virgen cada septiembre.
La misión principal de los Veleros es la colocación y el cuidado de la candelería que ilumina el altar de la Virgen. Esto incluye la disposición de velas y flores frescas en el altar durante tres «puestas» distintas a lo largo de la Novena. Estas puestas implican desmontar y volver a montar todo el altar, lo que requiere una coordinación precisa y un esfuerzo considerable.
La primera de las puestas se realiza el día 7, la segunda el día 10 y la tercera el día 14.
La primera puesta es algo más liviana puesto que el altar está vacío y solo tienen que colocar la candelería y cuentan con algo más de tiempo, en cambio, la segunda y tercera son algo más complicadas puesto que hay que comenzar al finalizar la misa de diez y terminar antes de la Novena de los niños a las seis de la tarde.
Durante las misas de la novena, los Veleros tienen la responsabilidad de encender y apagar las velas en momentos específicos. La primera vela se enciende temprano en la mañana, y el altar se ilumina completamente para la novena de las seis. Luego, las luces se ajustan para las misas de las ocho y las diez de la mañana, y finalmente se apagan completamente después de la misa de las once hasta las nueve de la noche, que se vuelve a encender el altar al completo para la novena vespertina, y así durante los nueve días de la novena.
Los Veleros actuales, Manuel Jiménez y Marcelino Sanromán, lideran este equipo de devotos que trabajan incansablemente para honrar a la Virgen de Gracia. Sin embargo, reconocen que su labor sería imposible sin la ayuda de los demás colaboradores. Cada miembro del equipo tiene sus tareas específicas, y juntos forman un equipo cohesionado y eficiente.
Desde estas líneas agradecen a todos y cada uno de ellos por su incansable ayuda durante todos estos años. Chica, Xipi, Mari, Amparo, Cristina, Maleni, Marina, Lorena, Joselito, Lolo, Pablo, Miguel, Ramón, Pepe, Perea, Garban, Enrique, Bermudo, Miguel, José Antonio, Chuma y Ángel.
Para los Veleros, iluminar a la Virgen de Gracia durante su Novena es un orgullo y un auténtico privilegio. A pesar del esfuerzo y el sacrificio que implica su labor, estar tan cerca de la patrona de la ciudad es una experiencia única y gratificante.
Como en todas las tradiciones, llega el momento de pasar el testigo a las nuevas generaciones. Manuel y Marcelino han identificado a un prometedor equipo compuesto por Ignacio, Alejandro, Pepe y Antonio, a quienes están enseñando durante este año. Confían en que estos devotos mantendrán viva la tradición de los Veleros y continuarán honrando a la Virgen de Gracia con la misma devoción y cuidado que ellos han demostrado durante años.
Los Veleros de la Virgen de Gracia de Carmona son un ejemplo de cómo la fe, la tradición y la comunidad se unen para mantener viva una costumbre que ilumina el corazón de la ciudad año tras año. Su dedicación y esfuerzo son un testimonio del profundo amor y respeto que sienten hacia la Santísima Virgen de Gracia.
